El uso de las coronas de zirconio es relativamente reciente en Odontología. Hace algunos años, era más habitual utilizar coronas de metal-porcelana o porcelana. Sin embargo, la introducción de las coronas de zirconio supuso la llegada de unas propiedades estéticas desconocidas hasta la fecha.
Índice de contenidos
¿Qué son las coronas de zirconio?
Las coronas de zirconio son unas prótesis dentales que se utilizan para restaurar y cubrir los dientes dañados o debilitados (por caries, traumatismos, etc.). Este tipo de coronas están fabricadas con zirconio, un material de gran calidad que ofrece resultados muy naturales.
En la actualidad, en Pérez Saavedra usamos únicamente las coronas de zirconio desde hace más de diez años. Esto se debe a las características de dureza, estética y biocompatibilidad que ofrece el material. Por ello, en nuestra clínica dental han quedado obsoletas las coronas de metal-porcelana, ya que utilizamos las de zirconio tanto en dientes naturales como para restaurar implantes dentales.
¿Cómo se hacen las coronas de zirconio?
El proceso para fabricar las coronas de zirconio consta de una serie de pasos:
Toma de impresiones
Dado que la corona de zirconio se confecciona de manera personalizada, el primer paso consiste en tomar impresiones (medidas) de la boca del paciente. En nuestra clínica dental de Málaga, este procedimiento lo hacemos con un escáner intraoral en tres dimensiones, ya que resulta más cómodo que las tradicionales impresiones de alginato.
Con estas impresiones también resulta posible fabricar una corona provisional, antes de colocar la definitiva. Dicha corona provisional está confeccionada con un material acrílico menos resistente.
Tallado del diente
Posteriormente, se realiza el tallado de la pieza dental, se vuelven a tomar impresiones con el escáner intraoral y se coloca la corona provisional. El tallado del diente permite reducir mínimamente su esmalte para que la corona encaje.
Fabricación de la corona
El laboratorio dental recibe las impresiones y utiliza una tecnología de diseño asistido por ordenador para confeccionar la corona. Una vez fabricada, los protésicos usan un sistema de fresado para esculpir y dar la forma final a la corona de zirconio. Por tanto, todo el proceso de diseño y fresado es guiado por ordenador.
Cementado
Una vez fabricada, se cementa la corona definitiva al diente, para que quede correctamente fijada y el paciente pueda desarrollar sus actividades cotidianas con normalidad (comer, hablar…). Para realizar el cementado, habrá que retirar antes la corona provisional.
Pulido
Si fuera necesario, en este último paso se pule la corona para darle un aspecto natural y dejar su superficie lisa y suave.
Ventajas de las coronas de zirconio
Las principales ventajas de las coronas de zirconio son las siguientes:
- Estética: el zirconio es un material translúcido que permite el paso de la luz. Esto aporta una gran naturalidad a la corona y hace que se asemeje al resto de dientes naturales del paciente. Además, al no contener ningún elemento metálico, como ocurre con las coronas de metal-porcelana, no existe el riesgo de que se transparente el clásico tono grisáceo propio del metal.
- Resistencia: las coronas de zirconio también se caracterizan por ser muy resistentes y duraderas. Están preparadas para soportar las fuerzas de la masticación y, si se cuidan adecuadamente, pueden durar muchos años.
- Biocompatibilidad: el zirconio es un material compatible con el organismo. Por tanto, es tolerado por el cuerpo y no provoca rechazo o reacciones alérgicas.
- Ajuste y precisión: otro de los principales beneficios de las coronas de zirconio es que se fabrican utilizando un sistema de diseño y fresado digital (CAD/CAM). Al estar todo el proceso guiado por ordenador, el resultado final es más preciso, se reproduce el diente natural de manera más fiel y se reduce considerablemente el margen de error humano.
- Menor desgaste dental: las coronas de zirconio tienen un grosor mínimo, lo que hace que haya que tallar menos el diente.
- Resistencia a las manchas: el zirconio es un material que no se tiñe con el paso del tiempo ni con la ingesta de alimentos y bebidas con coloración.
¿Cuánto duran las coronas de zirconio?
Las coronas de zirconio son reconocidas por su durabilidad y resistencia. Sin embargo, el tiempo que duran depende de varios factores (higiene bucodental, hábitos de alimentación, bruxismo…). Por lo general, y siempre que se sigan los cuidados adecuados, las coronas de zirconio duran entre 10 y 15 años.
¿Qué es mejor una corona de porcelana o de zirconio?
La elección entre una corona de porcelana y una corona de zirconio depende de diferentes factores (ubicación del diente, capacidad económica, recomendación del dentista…).
En términos generales, podemos decir que una corona de porcelana, o incluso de metal-porcelana, puede ser más adecuada para el sector posterior de la boca. Esto se debe a que son más económicas y apenas se ven.
En cambio, en el sector anterior de la boca es preferible utilizar una corona de zirconio ya que, aunque tenga un precio superior, aporta una gran estética a los dientes que son especialmente visibles al sonreír.
De todas formas, si tienes dudas sobre si es mejor una corona de porcelana o una de zirconio, puedes pedir recomendación a nuestros dentistas.
¿Qué precio tiene una corona de zirconio?
Normalmente, el precio de una corona de zirconio oscila entre los 380 y los 550 euros. Sin embargo, antes de ofrecer un presupuesto es necesario valorar a cada paciente, para comprobar si la corona de zirconio es la opción de tratamiento más adecuada.
Si estás interesado en las coronas de zirconio, te invitamos a consultar con el equipo médico de Pérez Saavedra, que cuenta con más de 30 años de experiencia en los tratamientos con coronas para rehabilitar dientes dañados o debilitados. En una primera consulta sin coste te informaremos sobre todas las opciones disponibles, con sus ventajas y desventajas.
Deja tu comentario